La libertad individual como un derecho, sin cargasestamentales y no tenida como un favor del poder, es claramentedetectable en un espacio y en un tiempo determinado: el mundoanglo-neerlandés del siglo XVII. Y lo es dentro de un discursoigualmente concreto: el republicanismo, el mismo que en dichacenturia y jurisdicción es reformulado por un potente influjocomercial que rediseñó los marcos institucionales tradicionalesimperantes a la vez que se sirvió de ellos.Tal es el cauce y devenir que gestó un tipo de libertad distante a lahasta entonces conocida, pero que es perfectamente ubicabletanto desde los discursos como desde los hechos en lasconvulsas experiencias nacionales de Inglaterra y de los PaísesBajos en los albores de la edad moderna. He aquí pues la génesisde un nuevo tipo de libertad que el liberalismo tomará para sí.Enmarcado dentro del campo de la historia de las ideas políticas,el presente estudio ofrece la panorámica de un siglo que esfundacional con respecto a las corrientes de pensamiento de lamodernidad. Pero será sobre todo con relación a la noción de libertad donde esa centuria se brinde a plenitud, lo que esrecogido por el autor en toda su extensión. 4